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En la Cátedra de Humanismo Médico del 31 de agosto el invitado especial fue el Académico Dr. Bernardo Ocampo Trujillo, médico egresado de la Pontificia Universidad Javeriana, especialista en Anestesiología y Reanimación de la Universidad de Caldas y especialista en Anestesiología de la Universidad Autónoma de México con el tema “Apuntes para la historia del Cuidado Intensivo en Colombia”.
El Dr. Ocampo se ha desempeñado profesionalmente por 60 años en el Departamento de Caldas en espacios como la Sociedad Caldense de Anestesiología, la Sociedad Colombiana de Anestesiología, el programa de especialización en Anestesiología de la Universidad de Caldas y la Academia de Medicina de Caldas.
Uno de sus amigos y colaboradores más cercanos fue el Dr. Jaime Herrera Pontón que en 1999 publicó el libro Historia de la Anestesia en Colombia, con quien se propuso avanzar y ampliar estos escritos sobre Anestesiología y Cuidado Intensivo, pero debido a su fallecimiento a inicios del siglo XXI, el Dr. Ocampo junto al Dr. Julio Enrique Peña Baquero, Exjefe de Anestesia del Hospital Militar y expresidente de S.C.A.R.E. (Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación), continuaron su legado como coinvestigadores.
Esta investigación histórica que ha ocupado al Dr. Ocampo tiene como resultado la publicación de varios libros, entre ellos: en 2011 para los 50 años del Programa de Anestesia de la Universidad de Caldas, “50 años del Programa de Especialización en Anestesia-Apuntes para su historia”, posteriormente “Pioneros e Ilustres de la Anestesiología en Colombia I y II” en 2012 y 2017 e “Historia de la Anestesiología Colombiana: Cronología” en 2016. Un nuevo libro próximo a publicarse se llama “Apuntes para la historicidad de la Anestesiología Colombiana”. 4 capítulos dedicados al Cuidado Intensivo:
- Apuntes para una historia del cuidado intensivo. B. Ocampo T.
- Pioneros del Cuidado Intensivo en Colombia (perfil biográfico de 25 pioneros). B. Ocampo T.
- Cronología de la Pandemia Covid-19. Dra. María Cristina Florián. Directora de la U.C.I. del Hospital San José.
- Apuntes del desarrollo de la enfermería en cuidado intensivo. Enfermera Claudia Ariza Olarte.
PIONEROS
Los inicios del cuidado especial de los pacientes graves, se remontan a las guerras de los ejércitos Napoleónicos que se preocuparon por la atención de los heridos que quedaban sin cuidados médicos y tenían que esperar hasta el fin del conflicto para ser atendidos.
Domique Jean Larrey (1766-1846), ingresó como médico al ejército francés como general de Napoleón, aportando grandes contribuciones a los servicios médicos de urgencia. Se le asignó la responsabilidad del transporte de los heridos durante y no después de la batalla, incluso diseño un tipo de ambulancia, una estructura halada por caballos, para transportar a los heridos.
Jean Henri Dunant (1828-1910), un hombre de negocios que visitó a Napoleón en Italia para resolver asuntos económicos, pero al ver la situación precaria que vivían los soldados ideó en 1863 la Cruz Roja Internacional que fue reconocida al año siguiente por la Convención de Ginebra. “Los heridos no tienen patria, deben ser tratados con solidaridad en condiciones humanas y dignas” Jean Henri Dunant.
Florence Nightingale (1820-1910), considerada la fundadora de la Enfermería en el mundo, llamada la “dama de la lámpara”. En los inicios de la Guerra de Crimea en 1854, cuando Inglaterra, Francia y Turquía declararon la guerra a Rusia, existía una alta incidencia de infecciones y la mortalidad llegaba al 40%. Con 38 voluntarios establecieron el Campo de Scurati y el “protocolo de atención crítico” con lo cual la mortalidad descendió hasta el 2%.
Walter Edward Dandy (1886-1946), uno de los padres de la Neurocirugía, pionero en el tratamiento de la hidrocefalia y de los aneurismas cerebrales. Organizó la primera unidad de Cuidado Intensivo en 1926 con 3 camas en el Hospital Johns Hopkins en Baltimore.
Ese mismo año 1926, Phillip Drinker y Louis Shaw, desarrollaron un respirador artificial capaz de alejar de las garras de la muerte a las personas con parálisis respiratoria, llamado el Pulmón de Acero (ventilador de presión negativa), diseñado para problemas respiratorios crónicos, intoxicaciones de carbono y gases tóxicos.
Durante la II Guerra Mundial las salas especializadas para el manejo del shock se establecieron para resucitar y cuidar a los soldados lesionados en batalla que eran sometidos a cirugía.
El concepto de Cuidado Intensivo surgió de la epidemia de polio de Copenhague en 1952, que provocó que cientos de víctimas sufrieran insuficiencia respiratoria y bulbar. Más de 300 pacientes requirieron ventilación artificial durante varias semanas que fue proporcionada por 1.000 estudiantes de medicina y odontología, empleados para ventilarlos manualmente a través de traqueotomías. El Dr. Bjorn Aage Ibsen atendió 2722 pacientes en 6 meses, 316 de ellos sufrieron parálisis respiratoria, él cambió el manejo de presión negativa al instituir la ventilación prolongada con presión positiva por medio de intubación dentro de la tráquea, para 1953 estableció la primera unidad médico/quirúrgica-UCI del mundo, en el Hospital Municipal de Copenhague.
El Dr. Carl-Gunnar Engström desarrollo los primeros ventiladores de volumen que sustituyeron a los estudiantes de medicina. La mortalidad disminuyó de 90% a alrededor de 25%. Los doctores Peter Safar y James Otis Elam desarrollaron el método de respiración boca a boca en la década de 1950, el ABC de la reanimación y ventilación pulmonar que popularizó la resucitación cardiopulmonar (Air way, Breathing, Circulation) y años después trabajaron el concepto de “Urgency & Emergency” y el de UCI (Unidades de Cuidado Intensivo).
COLOMBIA SIGLO XX- DÉCADAS 60 – 80
El Dr. Hollman Augusto Moreno Céspedes lideró procesos de Anestesia y Cuidado Intensivo en el Instituto Franklin Delano Roosevelt fundado en 1947, pero la primera referencia que se hace en Colombia de una unidad de Cuidado Intensivo es de 1956 en el Hospital San Juan de Dios, cuando el Dr. Aníbal Galindo abre un espacio para atención de pacientes quirúrgicos con 3 camas, el Dr. Galindo adquirió un visoscopio (monitor de signos vitales) con el que recorría la ciudad monitorizando y apoyando pacientes “graves”, posteriormente fue Presidente de la Sociedad Colombiana de Anestesiología y abrió las primeras clínicas de manejo del dolor en el país.
Un caso mediático tuvo que atender el Dr. Ocampo en el Hospital Universitario de Caldas en 1968, una mordedura de serpiente “rabo de ají” ocasionó al Ingeniero Gilberto Villegas Velásquez una parálisis total que lo llevó a una insuficiencia respiratoria. A falta de un ventilador mecánico en el Hospital, varios doctores tuvieron que ventilarlo manualmente por 3 días con una máquina de anestesia mientras llegaba un nebulizador ultrasónico con el que pudieron atender finalmente al Ingeniero, duró 19 días en recuperación, tiempo en el cual el Dr. Ocampo estuvo monitorizando su recuperación día tras día.
En 1969, en el Día Mundial de la Salud, se inaugura la Unidad de Cuidado Intensivo del Hospital San Juan de Dios y como anécdota el representante de la Organización Mundial de la Salud que se encontraba presente para la inauguración tuvo un infarto, así se convirtió en el primer paciente de la Unidad. Ese mismo año, Eduardo García Vargas organiza la unidad independiente de atención postcirugía cardiaca en la Clínica Shaio con 2 monitores, 2 ventiladores (un Emstrong y un Bird Mark 7 donado por el Dr. Forrest Bird). En 1970 el Hospital Militar en cabeza del Dr. Julio Enrique Peña, jefe del Dpto. de Anestesia abre la Unidad de Cuidado Intermedio Postquirúrgico y la Unidad de Cuidados Coronarios a cargo del Dr. Enrique Alvarado. A partir de allí fueron muchas las Unidades fundadas en varios Hospitales del país como el San Vicente de Paúl en Medellín, el Universitario del Valle en Cali, el Universitario de Caldas, en Manizales.
Los doctores Jaime Casasbuenas Ayala y Germán Muñoz Werther pueden considerarse de los primeros formadores de especialistas en Anestesia en tiempos donde la formación se impartía en los hospitales y no tanto en Universidades. Para 1989 se llevó a cabo el 1er. Congreso Internacional de Monitoria y Seguridad en Anestesia y Medicina Crítica con la asistencia de reconocidos especialistas de Colombia y el exterior.
MONITORIZACIÓN
Juan Marín Osorno, pionero de pioneros de la anestesiología colombiana administraba la anestesia con Ombrédanne un aparato pesado que requería el uso de las dos manos para sostenerlo sobre la cara del paciente y administrar el éter o cloroformo, al ver esta dificultad inventó lo que llamó el Panfonendoscopio (a la izquierda), con una conexión al oído, y otra modificada con una llave de tres vías una para auscultar el corazón, otra la respiración, y la última para tomar la presión arterial.
La monitoria básica en la década del 60 y 70 se hacía a través de la presión arterial, el pulso, la respiración y la “perfusión periférica”. La primera monitorización invasiva fue la presión venosa central, con catéteres inexistentes (nunca había suficientes), equipos de venoclisis recortados y esterilización empírica en solución de belzanconio. La mayoría de catéteres se colocaban por disección de vena basílica.
En los años 80s la cateterización para presión venosa central se hacía con un catéter que iba a la aurícula derecha a través de la vena subclavia o por disección de la vena, con una llave de tres vías, las otras dos conexiones iban hacia la solución salina y al equipo de venoclisis. Un esparadrapo pegado al soporte tenía las mediciones, el 0 debía estar a la altura de la aurícula. La cateterización arterial para presión arterial continua se hacía con agujas en la arteria radial y disección de la arteria con llave de 3 vías. Un manómetro como el usado en tanques de oxígeno en mm. de mercurio, ubicado al nivel de la aurícula llevaba un registro de la presión arterial. En los dos casos si se modificaba la altura de la mesa, debía recalcularse el dato de medición.
La medición de la concentración del oxígeno se hacía a través de varios métodos: medición de gases en sangre por el método de Donald Dexter Van Slyke, por oxígeno transcutáneo, oxígeno local que se libera de los capilares a través de la piel, por Oximetría de pulso, los primeros oxímetros pesaban más de un kilo y debían ponerse sobre una mesa. El primer equipo de gases sanguíneos fue traído por el Dr. Rafael Sarmiento Montero que debía transportarlo de clínica en clínica tomando las muestras para hacer las mediciones en la clínica de Marly.
Otro de los artífices en la consecución de equipos fue el Dr. José Felix Patiño quien trajo los primeros 4 escanógrafos que se instalaron en diferentes partes del país y los primeros equipos de gases sanguíneos, el mismo Dr. Patiño organizó un equipo que recorría el país para enseñar a sus colegas el uso de estos equipos.
Se estableció que uno de los elementos fundamentales en cuidado intensivo es la nutrición parenteral, también impulsada por el Dr. Rafael Sarmiento que había leído en las Clínicas Quirúrgicas de Norteamérica de 1970 los trabajos de Dudrik, “los pacientes graves, críticos, hay que nutrirlos”. El Dr. Patiño también profundizó en el estudio de los cambios metabólicos de los pacientes críticos y publicó su libro “Metabolismo, Nutrición y Shock”.
Los inicios de la ventilación mecánica también fueron precarios, el Dr. Oscar Tonelli descubrió a su llegada al hospital San Rafael que la ventilación se hacía manualmente e ideo un sistema conectando una aspiradora Electrolux a un Spyro Pulsator que funcionaba a presión y requería aire comprimido para operar.
Tan importante como la ventilación mecánica ha sido la terapia respiratoria y son muchos los profesionales que han sido parte importante de su evolución en Colombia, ya sea a través de la compra de equipos, la capacitación en la materia, o el cuidado personal que brindaron a sus pacientes, entre ellos, Rafael Sarmiento Montero, Gabriel Mena, José Carlos Miranda, Darío Maldonado, Jorge Colmenares, Carlos Salinas A. y la Hermana Karels en el Instituto Roosevelt.
En 1977 se funda la Sociedad Colombiana de Cuidado Intensivo, el primer presidente fue el doctor Jaime Potes, en 1992 se celebra el 1er. Congreso Oficial Colombiano de Cuidado Intensivo, en 1994 se funda la Asociación Colombiana de Medicina Crítica y en 1995 la Asociación Colombiana de Cuidado Intensivo. En 1996 se reúnen las 3 Asociaciones que existían y se crea la ACMI. Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado Intensivo por iniciativa del Dr. Juan Martín González.
La Cátedra puede verse en: Apuntes para la historia del Cuidado Intensivo en Colombia
El Dr. Ocampo ha sido profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Caldas en pregrado y postgrado, cofundador de la Universidad Autónoma de Manizales.
Miembro de la Junta Directiva de la Dirección Territorial de Salud de Caldas, pertenece a varias Asociaciones y Sociedades Médicas del país y tiene numerosas publicaciones en revistas, libros y manuales.
Resumen de la presentación, Victoria Rodríguez G., responsable de plataformas digitales en la ANM.