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En la imagen los Académicos Hugo Sotomayor Tribín y Luis Carlos Villamil Jiménez. Cátedra de Humanismo Médico.
Juan de Dios Carrasquilla y la contratación de un veterinario francés.
Carrasquilla, fue un erudito, conocedor de la agricultura y los problemas de salud animal, era un importador de ganado de Europa y Estados Unidos. Desarrolló una ganadería muy importante en su finca, de nombre El Coclí, que convirtió en un centro de investigación para la ganadería, iniciando allí estudios genéticos. Con Carlos Michelsen Uribe funda en 1879, una revista que se llamó “El agricultor”, donde se discutían temas de interés para la agricultura, la ganadería y el desarrollo rural del país. A lo largo de su vida cumplió muchas funciones. Dirigió el Instituto Nacional de Agricultura en 1890, fue miembro de la Sociedad de Medicina y Ciencias Naturales en 1885, antecesora de la Academia Nacional de Medicina, tuvo un emprendimiento importante en el Instituto de Seroterapia con el denominado “suero Carrasquilla”, obtenido mediante la inoculación de sangre de enfermos de lepra en equinos y caprinos. El suero se exportó y se probó en varios países por un tiempo y aunque no arrojó resultados concluyentes, fue un aporte importante a la investigación sobre la lepra.
Carrasquilla, Camacho Roldán y Michelsen, siendo miembros de la Junta Directiva de la SAC (Sociedad de Agricultores de Colombia), iniciaron las gestiones para que el Gobierno autorizara la contratación de un veterinario bacteriólogo. En 1882, José J Triana, cónsul de Colombia en París, y además médico naturalista comenzó el proceso en Lyon donde examinó a varios candidatos.
La Escuela Veterinaria de Lyon, fundada en 1761, estaba a la vanguardia de la bacteriología. Allí tenían un conocimiento muy profundo de los métodos Pasteurianos, incluso trabajaban con la inoculación de virus de viruela de las vacas y sus replicación en terneros. Entre los profesores más destacados estaban Auguste Chauveau (profesor de patología comparada; bacteriología, vacuna), y Víctor Gaultier (profesor de enfermedades infecciosas; pionero de la vacunación contra la rabia, candidato al Nobel de Medicina de 1908). Triana entrevistó y contrató a Claude Vericel. Doctor en veterinaria, graduado en 1878, el mejor de su promoción con área de profundización en bacteriología.
Vericel llegó a Colombia en 1884 y se presume trajo consigo el primer microscopio que llegó a estas tierras. En 1885, inició la Escuela Veterinaria y comenzó a socializar entre los estudiantes a estos organismos diminutos denominados “microbios”. Entre las asignaturas de la escuela estaban la fisiología de los bacteridios en las fermentaciones y en las enfermedades infecciosas, inmunidad, atenuación de virus, inoculaciones preventivas, virus y vacunas.
“La bacteriología fue el campo en el que se dio la colaboración más estrecha entre médicos y veterinarios”. Obregón, 2021.
Federico Lleras Acosta.
Federico Pablo de la Cruz Lleras Acosta nació en 1877 y estudió en el Colegio Nacional de San Bartolomé. Después de su graduación, ingresó a la Escuela Veterinaria adscrita a la Facultad de Medicina y Ciencias Naturales de la Universidad Nacional. Era un estudiante consagrado, apasionado por la Bacteriología. Trabajó con el profesor Vericel en anaerobios (Clostridium). Fue asistente de Jorge Lleras Parra en el parque de vacunación, (vacuna contra la viruela), durante el primer año. También fue preparador de anatomía en la escuela de Veterinaria.
Fue un científico riguroso, forjó una carrera de investigador bajo condiciones adversas presentes en el país en ese momento, desde el punto de vista económico, de infraestructura física y del conocimiento. De acuerdo con el doctor Carlos San Martín Barberi, al doctor Federico Lleras se le debe el establecimiento de la bacteriología o mejor de la microbiología como una rama de la medicina.
La investigación para la higiene y la salud pública.
La higiene y la salud pública fueron sus primeras preocupaciones. El primer trabajo realizado por el Dr. Lleras fue su tesis de grado bajo la dirección del doctor Claude Vericel, presentada en 1899 y cuyo tema central era la “inspección sanitaria de las carnes: de las diversas situaciones que alteran la calidad de la carne y perjudican la conservación de ellas en las reses sacrificadas en el matadero de Bogotá”.
Analizó sus características, cuanto debían caminar las reses para llegar a Bogotá, los procesos en el matadero, la temperatura, entre otros factores. Además, fijó recomendaciones sobre la estructura del matadero para las autoridades y otras para restaurantes y amas de casa sobre como conservar la carne en mejores condiciones y cocinarla apropiadamente.
También trabajó con Bacillus anthracis y con clostridium chauvoei. Otros de sus trabajos se relacionaron con la calidad del agua que era insalubre y el sistema de acueducto muy incipiente, – fue uno de los primeros en recomendar la cloración del agua. Habló sobre la malaria bovina -un trabajo interdisciplinar realizado junto a los doctores Vericel y Roberto Franco- presentado en 1909 y otro trabajo sobre el control de una plaga de langostas que se presentó en 1913, considerado el primer experimento de control biológico de plagas en Colombia.
Su don de palabra le permitía hablar con mucha claridad a médicos, al Gobierno, a madres de familia, a hacendados y a la comunidad en general con la misma propiedad.
En 1902, inicia el montaje de un pequeño laboratorio particular, sugerencia del doctor Roberto Franco Franco, que para 1906 se había convertido en un lugar de visita para los médicos familiarizados con las nuevas concepciones de la práctica médica y el apoyo del laboratorio. Allí, acudían los médicos más prestigiosos de la ciudad en busca de ayuda para un mejor ejercicio de su profesión o simplemente para comentar casos y anécdotas de su trabajo. Los asistentes del profesor Lleras, generalmente estudiantes, lo reemplazaban mientras dictaba las asignaturas de bacteriología y parasitología en la facultad de medicina y cuando por motivos de salud debía ausentarse. Se convirtió en un lugar de tertulia acompañada de café que el mismo Dr. Lleras preparaba para sus colegas.
En 1907, el doctor Jesús Olaya Laverde presentó ante la academia, la investigación realizada por el profesor Lleras Acosta sobre el carbón sintomático en la sabana de Bogotá. La evaluación fue satisfactoria y el 14 de mayo de 1909 se posesionó como Miembro de Número de la Academia Nacional de Medicina. Ocupó los cargos de tesorero, vicepresidente y presidente desde 1936 hasta su muerte.
En su investigación sobre malaria bovina, sus experiencias fueron pioneras en los procedimientos de premunición para la inducción de inmunidad mediante infección artificial controlada. Para elevar los niveles inmunitarios de los animales traídos de Europa y que pudieran sobrevivir a los ataques de hemoparásitos, usaba “vacas donantes” de clima cálido que presentaban hemoparásitos en su sangre e inoculaba esa sangre en los animales europeos en varias dosis para que se adaptaran.
Fue el primer director del Laboratorio de Higiene y y en el informe de actividades presentadas hacia finales de 1910, se habían analizado 148 muestras de 12 productos distintos, entre los que se encontraba una inspección sanitaria de las leches de consumo, un análisis de las cervezas fabricadas en la ciudad e incluso muestras para diagnóstico del bacilo de Hansen.
La investigación para el apoyo clínico.
Colaboraba frecuentemente con otros investigadores. En 1919, en colaboración con el profesor José del Carmen Acosta presentó al Congreso Médico llevado a cabo en Tunja, el trabajo titulado “Tratamiento de la sífilis del sistema nervioso central“, con él Dr. Acosta también publicó un trabajo llamado “Nuevas tendencias en el tratamiento de la infección puerperal”.
En colaboración con el doctor Calixto Torres Umaña publicó las memorias tituladas “Epidemia de enteritis de los niños producida por el enterococo“. Prepararon unas soluciones de estreptococos en leche descremada para administrar por vía oral o rectal a los niños y un suero hiperinmune en cabra para el tratamiento de los casos más graves. Con Jorge Tascón y Guillermo Márques estudió la meningitis cerebroespinal.
El proyecto institucional. Laboratorio Central de Investigaciones de la lepra.
Proyecto del gobierno de Alfonso López Pumarejo donde se funda el Laboratorio Central de la Lepra y el Dr. Carrasquilla es nombrado director. Fue el inicio de las investigaciones sobre, lepra en el país, trabajo en equipo con varios médicos entre ellos Julio Aparicio, Abraham Afanador, José Uribe, Alfonso Rueda, Federico Lleras Restrepo y Luis Patiño Camargo. Sembró sangre de leprosos en medio de Petragnani (usado en procedimientos cualitativos para el aislamiento y cultivo de micobacterias), de 66 enfermos. En 50 logró aislamientos, identificó un bacilo ácido alcohol resistente, similar morfológicamente al bacilo de Hansen. La cepa aislada conservaba sus características después de 50 pasajes, incluso inocularon a un macaco , donado por la Fundación Rockefeller que el Dr. Lleras tuvo la oportunidad de visitar, allí replicaron sus estudios, examinaron sus cultivos, le hicieron algunas recomendaciones y suministraron reactivos.
Viaja al Congreso Mundial de Leprología a El Cairo como delegado por Colombia en compañía de Gabriel Uribe Misas y Alfonso Rueda Herrera. Tenía una salud mermada para ese momento, pero allí se reunirían con investigadores de diversos continentes que se interesaban en la bacteriología del bacilo de Hansen. El viaje tenía una escala en Marsella, Francia donde muere el 18 de marzo de 1938. En el Congreso se presentan 67 trabajos, 13 en el campo de la bacteriología. El tema del aislamiento y cultivo del bacilo se discutió sin llegar a consensos y el día final programado para el 27 de marzo se hace un homenaje al Dr. Federico Lleras por su repentina muerte antes de llegar al Congreso.
Participación en política.
Fue breve, participó en el Consejo de Bogotá en representación del liberalismo y participó en manifestaciones contra el gobierno conservador de Miguel Abadía Méndez en 1929.
Distinciones y membresías.
Murió haciendo lo que más le gustaba. Fue un gran investigador, un gran comunicador y recibió múltiples distinciones por su trabajo. Fue Doctor Honoris Causa de la Universidad de Antioquia, Doctor Honoris Causa de la Universidad de Costa Rica, Miembro de Número y presidente de la Academia Nacional de Medicina de Colombia. Miembro de número de la Academia de Ciencias Exactas Físicas y Naturales. Cruz de Boyacá y Órden de las Palmas de Oro, oficial de la instrucción pública de la República Francesa. Miembro de la Sociedad sanmartiniana.
A él se debe el uso de la bacteriología como una herramienta de apoyo a la clínica y la consolidación de una carrera de científico mediante la medicina experimental y la práctica bacteriológica.
EL Dr. Luis Carlos Villamil Jiménez es doctor en Medicina Veterinaria y magíster en Medicina Preventiva de la Universidad Nacional de Colombia; Doctor of Philosophy de la Universidad de Reading, Inglaterra. Ha sido profesor asociado de la Universidad Nacional de Colombia, profesor titular de la Universidad de La Salle Investigador emérito de Colciencias; miembro activo de la Sociedad Colombiana de Historia de la Medicina; miembro asociado de la Academia Nacional de Medicina; miembro de número de la Academia Colombiana de Ciencias Veterinarias; miembro del grupo de Epidemiología y Salud Pública de la Universidad de La Salle.
El Dr. Hugo Sotomayor Tribín es pediatra, historiador y museólogo destacado. Doctor en Medicina y Cirugía de la Universidad Nacional de Colombia. Especialista en Pediatría de la Universidad Colegio Mayor del Rosario y Hospital Militar. Maestría en Seguridad y Defensa Nacional de la Escuela Superior de Guerra. Curador del Museo de la Academia Nacional de Medicina de Colombia. Profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Militar de Colombia y designado Académico Ejemplar en 2022.
Sesión completa en: Federico Lleras Acosta y la bacteriología
Resumen de la Sesión. Victoria Rodríguez G., responsible web Academia Nacional de Medicina