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Un medico urgentólogo de un hospital de Seattle, Washington, se salvó de morir por Covid-19, gracias a que sus colegas utilizaron una droga experimental que está indicada para la artritis reumatoidea, el Actemra, para tratarle la tormenta citoquinica que habia desarrollado. Esta droga habia sido usada anteriormente por médicos Chinos e Italianos en situaciones similares.
El Dr. Ryan Padgett había alcanzado a intentar salvar a dos docenas de ancianos con Covid 19, pero todos fallecieron. Para ese momento, los médicos solo usaban guantes y tapabocas. Despues usaron respiradores de mas sofisticación, pero allí no estaban familiarizados con su uso. Cuando alcanzó a darse cuenta de la agresividad del nuevo virus, empezo a desarrollar fiebre, tos y disnea. Fue hospitalizado en una UCI y puesto en un respirador, pero 5 días mas tarde su situación había empeorado.
Sus colegas hicieron lo indecible por salvarlo pero empezó a presentar falla multisistémica. Se dieron cuenta de que a este hombre de 44 años, sano, de alta estatura y mas de 100 kilos de peso lo estaba matando su propio Sistema immune. Su cuerpo albergaba un intenso episodio inflamatorio. Había que administrarle un inmuno-supresor y se acordaron del ACTEMRA, Lo conectaron a una máquina Corazón-Pulmón (ECMO) facilitada por un hospital vecino, y le administraron la droga. Un tiempo despues de haber mejorado y salido del hospital, el Dr. Padgett le dijo al periodista Richard Read, del diario Los Angeles Times “este fue un salvamento de película. Esto no ocurre frecuentemente en el mundo real. Yo tuve la fortuna de ser tratado por un equipo elite que no quizo resignarse a perderme. Vamos a experimentar”.
El cirujano cardiovascular Samuel Youssef y el cardiólogo Matt Hartman, del equipo medico tratante informaron que despues de 4 días con la droga -suplementada con vitamina C- los niveles de oxígeno en la sangre del paciente empezaron a mejorar, hasta su total normalización.
La tormenta de las citoquinas genera en el cuerpo un nivel astronómico de inflamación. La recuperacion física y cognitiva fue lenta, pero el doctor espera poder volver a trabajar en la sala de urgencias. Poco tiempo despues cumplió 45 años y se casará en ceremonia privada con su novia. Los medicos tratantes le contaron que despues de él, lograron salvar a una madre de 33 años que tenía tambien la tormenta citoquínica y usaron el mismo tratamiento.
Adaptado de Los Angeles Times